Último partido y el Calderón ha cerrado sus puertas hasta la temporada que viene, esperemos que sea igual o más grandiosa que esta (poque pase lo que pase, esta ya lo es).
No he podido disfrutar más, además en el Fondo Sur, ¡menudo ambiente!
Vivir este último enfrentamiento ha sido único, con mucho sufrimiento.
Y no pasa nada, nada de nada, hay que seguir, hay que dejarse la piel el sábado, hay que morir en esa final.
Tenemos confianza, fe, esperanza, sueños, sólo hay que seguir creyendo.

Esto va para los que decían que el Atleti pinchaba hace meses: Comenzamos el capítulo 38, y nos jugamos la liga en el Camp Nou. Nos vale empatar o ganar.
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